Es curioso
29 de diciembre de 2019. 9.30 am. Ubud.
Es curioso.
Hemos quedado para desayunar en Watercress, un sitio que teníamos fichado por instagram y que casualmente está justo delante del hotel.
El restaurante es muy mono, propio de instagramers que van a hacer fotos a sus platos, y la comida (para que engañarnos) es bastante europea.
Hoy tenemos un día más bien relajadito, el bochorno que hace hoy es arrebatador.
Empezamos por visitar el Monkey Forest, como ya me habían advertido, es un poco turistada pero muy curioso de ver. Vamos andando, está a unos 10-12 minutos del hotel así que llegamos en nada.
Es un bosque que está lleno de pequeños monos (y algunos no tan pequeños), de todas las edades donde la gente pasea por ahí haciendo fotos. Llama la atención como los padres protegen a sus crías para que nadie las toque. Vemos monos amamantando, monos peleando, monos jugando y hasta un cementerio de monos donde curiosamente hay un mono que parece que esté velando a alguien.
Se me sube un mono a una pierna, me salta a la otra y yo pego un chillido que creo que todos los monos del parque me tienen que estar enseñando los dientes ahora mismo, como le han hecho a Gemma cuando a intentado encender la fuente para que uno bebiera.
La verdad que cuando te los pones a observar detenidamente es curioso darse cuenta que realmente son muy parecidos a nosotros.
Con el ticket del Monkey Forest nos incluye un bus que nos acerca al mercado de Ubud, así que hoy toca compras, paseito y aprovechar para comprar los souvenirs que queremos. Increíble lo que tienes que llegar a negociar el precio, acabas llegando hasta un 70% menos de lo que te habían pedido inicialmente.
Pasamos por varias tiendas al salir de market y nos dirigimos para el resort.
Al llegar nos relajamos un rato en la piscina, Sonia se tuerce el tobillo en un intento de ir a correr y unos cuantos van a darse un masaje.
Hacia las 9 y pico salimos a cenar a un restaurante cerca del hotel, Pissari Bali, donde nos atienden súper bien y nos ponen en una terraza interior muy tranquila que tienes. La comida está muy buena y hemos vuelto a cenar por alrededor de 4€ (70k de rupias).
Al terminar de cenar, subimos a tomar algo en un restaurante y club que hay cerca, No Más.
Día relajado pero necesario, mañana madrugamos para ir a las islas Gili.
#balixmas
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